Cuando la máscara cayó
quedé atrapado ante tu
mirada felina.
En ese momento supe
que serías mía.
Mi sumisa... mía en cuerpo
y alma.
Escucha mi voz, te guiará
hacia tus deseos más oscuros.
No temas,
déjate llevar,
esta noche seré tu dueño.
Postrate ante mí
esperando con ansia mis caricias,
siente mi presencia,
mis manos recorriendo
tus pechos... ten paciencia,
la espera valdrá la pena.
Eros©️
Cuando el placer es la recompensa, toda espera vale la pena, postrada y dispuesta a los deseos del Amo.
ResponderEliminarBesos dulces Dakota y dulce último finde del año.
Una gran recompensa sin duda, solo ha de dejarse llevar.
EliminarBesos Dulce caballero y que disfrutes el ultimo finde!!
Qué delicioso tu poema!... La sumisa es la libertad misma, porque sólo es verdaderamente libre cuando está atada a alguien que la domina. Y en esta libertad encuentra el placer sublime, el amor supremo...
ResponderEliminarel éxtasis!
Besosss...y disfruta del placer pleno.
Hola Albino, una libertad que saboreara sin duda. Besos!
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